DIA DE LA MEMORIA Y LA JUSTICIA

Esa tarde de invierno esperaba que regresaras de la Facu para tomar unos mates. Habíamos decidido a la mañana no ir a Plaza Italia donde vendíamos los farolitos de lavanda que nos ayudaban a aumentar nuestra olla popular , te acordás? Hacíamos rebaja por 3 farolitos y por 5 iba uno de regalo.


Ese día yo estaba sentada sola en la cocina y lo recuerdo como si pasara ahora, ese escalofrío que sentí de golpe en la piel , el cuerpo y el alma… Y me dio miedo…
Ya era entrada la noche y no habías vuelto , entonces avise a las pocas compañeras que estaban en la pensión que iría a buscarte por los lugares de siempre…


Los lugares de siempre…. El departamento de las chicas de Gualeguaychu…la casa de los estudiantes de Junín…. Y seguí el recorrido hasta la parada del micro que iba para el lado de Punta Lara donde vivía tu novio…,


De pronto sentí a mis espaldas el motor de un auto que andaba muy despacio casi a la par mía… pero yo sabía que no tenía que mirar. Lo sabíamos todos…., bajen la vista, no se den vuelta, no miren….
El miedo se apoderó de mí.


Y fueron eternos segundos, garras que me atrapaban, una bolsa en la cabeza y arrastrada dentro del auto en la parte de atrás en el piso. Cada vez que quería hablar me pateaban…así que callé, me callaron…y me callaron por muchísimos años…


Luego de un tiempo que jamás podré decir ni recordar cuanto fue …me bajaron del auto con las manos atadas y tiraron tan fuerte que me arrastraban por el piso. Mis manos, aún con perfume a lavanda iban dejando su piel en ese piso frió de cemento.


A lo lejos se oían gritos agudos de dolor y gritos graves de los torturadores…..


Se abrió una puerta y me tiraron dentro de algún sitio. Y te escuché gritar entonces comencé a llamarte, entonces abrieron la puerta y te tiraron a mi lado.


Todo estaba oscuro, frió, húmedo.. aterrador…


Te acordas? Nos preguntábamos porqué nos habían llevado, si nosotros de política no teníamos ni idea, si no teníamos amigos zurdos, si esto…si aquello….


Y primero te llevaron a vos…y ya no volví a verte…
Luego las bestias vinieron por mi…..


Amiga mía...aún hoy
El llanto se ahoga en mi pecho...
Siento los gritos de todos y mis propios gritos…
Me duelen los huesos..como entonces...
Siento el sabor a sangre...en la boca
Mis manos se congelan..
Todo está oscuro..menos vos...
Trato aún de encontrar un porque...
Entonces tus manos..cobijan a las mías...
como yo solía hacerlo con las tuyas en aquel infierno..
Y me sonríes...


Cuántos como vos ya no están? Muchas veces me pregunto porqué me dejaron viva.


Hoy para mi la memoria es una llaga pero también una llama que prometo nunca dejar apagar.


Por vos , por todos lo que no están y para las generaciones que vienen, para que NUNCA MÁS permitamos frases como la de un general represor que decía:


Primero mataremos a todos los subversivos, luego mataremos a sus colaboradores, después... a sus simpatizantes, enseguida... a aquellos que permanecen indiferentes, y finalmente mataremos a los tímidos.


Quiero dejarles hoy una frase de Ghandi:


"La violencia es el camino de los bárbaros; la no violencia, el de los hombres".


Hoy, detrás de los ojos de gente de mi generación hay un grito ahogado hacia todos los jóvenes pidiéndoles que no dejen de luchar por esa frase que hoy pertenece a todo el pueblo argentino y es…. NUNCA MÁS. Y decirles que Cantamos porque los sobrevivientes y nuestros muertos quieren que cantemos.